¡No le des posibilidades ni al fuego ni al humo!

Los materiales de aislamiento tienen un gran impacto en el origen, el desarrollo y la propagación de un incendio. Estos materiales pueden obstaculizar el trabajo de los bomberos, poner en peligro la estabilidad de un edificio o instalación y llevar a situaciones que ponen en peligro la vida de personas.

¿Sabía que cada año Europa se enfrenta a más de 2 millones de incendios

en edificios e instalaciones industriales?

Desastres que, cada año, matan a más de 4.000 personas y suponen miles de millones de euros en daños. La seguridad contra incendios de un edificio o instalación depende en gran medida de los materiales que se utilizan.

El material de aislamiento juega un papel importante en el desarrollo y la propagación del fuego. Algunos materiales son altamente combustibles y aceleran la propagación del fuego.

Otros aislamientos pueden absorber líquidos inflamables, por ejemplo, en instalaciones industriales, y se convierten en un sistema de aislamiento altamente combustible que es propenso a la combustión espontánea. Un material de aislamiento que sea impermeable a la humedad o impermeable a sustancias químicas y productos derivados del petróleo no tiene este problema.

 

 

El peligro del humo y los gases

Cuando los materiales de aislamiento orgánico se calientan, emiten humo y gases que agregan más combustible al fuego. Las personas que inhalan gases tóxicos pierden el conocimiento. El humo afecta a la visión y las víctimas se desorientan.

En menos de 3 minutos, la vida de las víctimas está en peligro. Los gases pueden causar hasta 14 tipos de cáncer en los bomberos.

El fuego siempre es un desastre financiero

126 mil millones de euros. Ese es el coste anual del fuego en toda Europa. Más del 70% de las empresas afectadas por incendios se declaran en quiebra en los 3 años posteriores al incidente. El fuego destruye importantes edificios arquitectónicos e históricos, lo que es una pérdida no cuantificable.

 

Protección contra incendios: nuestra responsabilidad

Un material aislante puede ofrecer mucho más que un rendimiento térmico. También puede desempeñar un papel crucial en la seguridad contra incendios de un edificio o instalación. El aislamiento incombustible aporta tranquilidad.

El vidrio celular FOAMGLAS® es un material aislante con propiedades ignífugas: no se quema y no es causa de propagación del fuego.

  • En caso de incendio, el aislamiento FOAMGLAS® no emite humo ni gases tóxicos.
  • El aislamiento FOAMGLAS® no produce humo espeso que pueda dificultar la vista de las salidas de emergencia
  • El aislamiento FOAMGLAS® no causa gotas llameantes que pueden dañar a las personas
  • El aislamiento FOAMGLAS® contribuye a una seguridad contra incendios adicional y brinda protección contra incendios en aplicaciones industriales. Tenemos soluciones de protección contra el “jet-fire”, de protección contra incendios de hidrocarburos y contra la penetración del fuego a través de muros.
  • El aislamiento FOAMGLAS® tiene un punto de fusión superior a 1.000 ° C (ref. DIN 4102-17, con un grosor ≥ 80 mm)
  • El aislamiento FOAMGLAS® no absorbe líquidos.

Para una máxima seguridad contra incendios, elija un material aislante que combine propiedades no combustibles y no absorbentes y, por lo tanto, evite la rápida propagación de incendios y vapores tóxicos. Es el caso del vidrio celular FOAMGLAS®.

 

¿Cómo se comporta el aislamiento FOAMGLAS® durante un incendio?

Efecto escudo térmico

Cuando el aislamiento de vidrio celular FOAMGLAS® se expone al fuego, la superficie comienza a "vitrificar", formando así una pantalla térmica como capa protectora.

Punto de fusión por encima de 1.000 ° C

La prueba del punto de fusión demuestra que después de 90 minutos de contacto con la llama, queda una gran parte de la masa del núcleo aislante. Esto demuestra que el aislamiento FOAMGLAS® ofrece un alto nivel de protección (DIN 4102-17 - espesor> 80 mm).

El aislamiento se refiere a proteger a las personas.

El aislamiento FOAMGLAS® tiene la clasificación de incendio más alta, A1, lo que significa que no es combustible de acuerdo con la norma europea. Esto significa que el vidrio celular es completamente incombustible y puede soportar temperaturas extremadamente altas. No arde, no se deforma, no produce humo ni gases tóxicos y, en caso de incendio, no forma gotas que caigan ardiendo.

El aislamiento FOAMGLAS® evita la propagación de las llamas a través del techo, las paredes y el suelo, y también garantiza que el fuego no se propague a las habitaciones adyacentes. Esto significa que las salidas de emergencia no están obstruidas y el personal del Cuerpo de Bomberos tiene más oportunidades de salvar la vida de las personas.

En caso de incendio, el aislamiento FOAMGLAS® aporta protección a los equipos de seguridad el tiempo suficiente para permitir el cierre seguro y controlado de la planta. Se ralentiza la propagación de chorros combustibles en llamas y de fuegos de piscinas de hidrocarburos, y se retrasa la posibilidad de un mal funcionamiento del equipo, dando al personal más tiempo para ponerse a salvo.

Para una total seguridad

Clasificación A1

Las placas de aislamiento FOAMGLAS® están clasificadas como no combustibles en la clasificación más alta (más segura) de las 7 clasificaciones europeas: clasificación de incendios A1 (EN 13501-1).

Fire Safe Europe (FSEU)

FOAMGLAS® es miembro de la FSEU. Todos los días, nuestros especialistas hacen todos los esfuerzos, junto con FSEU, para crear conciencia sobre la importancia de la seguridad contra incendios entre los responsables políticos europeos.

Referencias con esta solución